Oración de la Mañana
Amado Arcángel Zadquiel, hoy me presento ante ti con humildad y gratitud en mi corazón. Te pido que ilumines mi día con tu luz violeta transformadora, ayudándome a liberar cualquier juicio o tensión que pueda cargar.
Guíame para encontrar el equilibrio en mis relaciones, actuando desde el amor y la comprensión. Que cada palabra que diga y cada acción que tome refleje paz, armonía y propósito.
Hoy, elijo abrazar el cambio con confianza y a buscar la sabiduría en cada experiencia. Que tu energía me inspire a ser un faro de luz para los demás y a avanzar con fuerza hacia mis sueños. Gracias, Zadquiel, por tu presencia y por recordarme que siempre puedo transmutar lo negativo en algo hermoso. Amén.
Recibe un abrazo muy fuerte con lluvia de Bendiciones del Cielo para ti.
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