El Arcángel Miguel no solo nos protege del miedo y las energías negativas, sino que también nos recuerda quiénes somos realmente. En los momentos de duda, cuando olvidamos nuestra propia luz, él nos guía de vuelta a nuestra esencia. Este ejercicio es una invitación a verte con amor y a reconocer el poder divino que habita en ti.
Muchas veces, cuando nos miramos al espejo, nos enfocamos en lo que creemos que nos falta o en lo que no nos gusta. Esta práctica transformará ese hábito y te permitirá verte con la mirada del amor, la fortaleza y la protección de Miguel.
Preparación del Ritual
Busca un lugar tranquilo donde puedas sentarte frente a un espejo sin interrupciones. Si deseas potenciar la experiencia, enciende una vela azul o coloca un objeto que te conecte con la energía del Arcángel Miguel.
Si en algún momento sientes resistencia o incomodidad, respira profundo y sigue adelante. Esta es una experiencia de transformación y sanación interior.
Paso a paso
- Coloca un espejo frente a ti y siéntate cómodamente. Asegúrate de que puedas ver tu rostro con claridad.
- Respira profundamente tres veces y relaja tu cuerpo. Siente cómo la tensión desaparece con cada exhalación.
- Mira tus ojos en el espejo y repite en voz alta:
“Arcángel Miguel, muéstrame la fuerza que habita en mí. Ayúdame a ver mi verdadero poder y a recordar que soy luz, soy amor y soy capaz de superar cualquier desafío.” - Observa tu reflejo sin juicio. No critiques tu imagen, solo contempla la luz y la vida en tus ojos. Mírate como Miguel te mira: con amor, protección y orgullo por todo lo que eres.
- Visualiza cómo un rayo azul comienza a brillar en el centro de tu pecho, expandiéndose hasta llenar todo tu ser. Siente cómo esa energía te envuelve con confianza, poder y seguridad.
- Sonríe a tu reflejo y di con firmeza:
“Soy fuerte, estoy protegido y avanzo con determinación. Nada puede debilitarme porque la luz de Dios brilla en mí.” - Coloca ambas manos sobre tu corazón y cierra los ojos. Siente la paz y la certeza de que dentro de ti habita una fuerza inquebrantable.
- Agradece a Miguel por recordarte tu verdadero ser. Cuando te sientas listo, abre los ojos y finaliza el ejercicio.
¿Cuándo hacer este ejercicio?
- Cuando sientas inseguridad o baja autoestima.
- Si te has alejado de tu esencia y necesitas reconectar contigo mismo.
- Antes de una situación desafiante que requiera confianza en ti mismo.
- En momentos en los que dudes de tu poder personal.
- Como un hábito diario para fortalecer tu amor propio.
Este ejercicio es un recordatorio de que la verdadera fortaleza está dentro de ti. Miguel no solo te protege del exterior, sino que también te guía para que recuerdes que tú eres tu propio guardián. Que cada vez que te mires al espejo, veas en ti la luz y la grandeza que siempre han estado ahí. 💙
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